
¡Bendiciones en esta hermosa mañana de sábado! Hoy quiero regalarte esta palabra que está en Mateo 6:34:
“Por lo tanto, no se preocupen por el mañana, el cual tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus problemas.” (Mateo 6:34, NVI)
Problemas, dificultades, ansiedad, desesperación… son parte del pan de cada día para la humanidad. El ser humano se desespera todos los días buscando cómo sacar adelante a su familia y cumplir con sus responsabilidades. Esto es algo que debemos considerar cada día: entender que Dios cuida de nosotros. Por más que nos preocupemos, eso no resuelve nada. Lo único que realmente resuelve es la confianza en Dios.
La solución está en presentarnos delante del trono de Dios y decirle: “Señor, aquí está este problema, esta situación, esta enfermedad; te lo entrego”. Él tomará el control de todo.
Oremos juntos:
Padre, en esta mañana venimos ante ti porque tú eres Dios poderoso, el que cuida de nosotros y tiene el control de todos los problemas, de la sanidad y de cada circunstancia de nuestra vida. Ponemos todo en tus manos, Señor, y pedimos que tu Espíritu Santo tome el control de cada problema que tenemos que resolver, porque tú eres quien nos ayuda a salir adelante. Te lo pedimos en el nombre de Jesús, y te damos gracias por el milagro recibido. Amén.
Recuerda bien: Dios cuida de cada uno de nosotros. Él te ama, me ama, y siempre está pendiente de todo lo que hagamos. Un abrazo, ¡que tengas un bendecido día!